jueves, 4 de noviembre de 2010

DIOS QUIERE QUE VIVAMOS

La familia en Santiago 2000

Hace unos días unos padres hablaban con sus hijos.

Por lo que intuimos a lo largo de la conversación entre ellos, algunos de los hijos había hecho algo que a los padres no les gustaba. Les hablaban de cómo hay que ser, de cómo hemos de comportarnos en la vida y de que ellos no eran agradecidos con lo que Dios les había dado.

A los hijos en ese momento hablarles de Dios no parecía que les tocara el corazón. Pero los padres insistían y los hijos cada vez se iban alejando más en sus razonamientos.

Entonces los padres cansados de que lo que ellos decían de Dios no les importara nada a sus hijos decidieron cambiar de estrategia y dijeron. Si no es por Dios, al menos comportaros bien por nosotros. Estamos agotándonos para que seáis niños felices y no os falte de nada. Realmente nos estamos matando por vosotros.

Entonces se hizo un silencio profundo y uno de los hijos contestó: Pues no lo hagáis, porque Dios no quiere que muráis por nosotros, sino que viváis para que podamos disfrutar todos juntos de la vida que Él nos ha regalado.

No queramos cobrar a nuestros hijos lo que hacemos por ellos. Dios nos lo da todo gratis.

Huellas

2 comentarios:

  1. Al final de la vida no nos examinarán sobre nuestras creeencias, sino sobre nuestra bondad

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  2. Otra reflexión profunda de Huellas. No debemos de cansarnos nunca de hablar con nuestros hijos de Dios aunque parezca que no nos están haciendo caso, siempre quedan las "huellas" y cuando menos lo esperas salen a la luz.
    Disfrutemos todos juntos de la vida que Él nos ha regalado

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