4ª SEMANA DE ADVIENTO
PRESENCIA
Hace unos días el evangelio de Mt 17,10-13 nos hablaba de la voz de los Profetas.
Cuando vino Jesús todos estaban convencidos de que antes de su venida tendría que venir Elías, un profeta, para anunciarlo. Pero Jesús les dice que el profeta ya ha venido, que es Juan el Bautista. O sea, no importa la persona, lo importante es que un profeta ha anunciado esa venida.
Muchos sentimos lo mismo, o sea, que antes de conocer a Jesús alguien nos lo ha anunciado, un profeta para nosotros. Esos profetas nos enseñan el camino para llegar a la PRESENCIA de Jesús.
Cuando nos preguntamos por los profetas que nos han anunciado esa venida seguramente pensamos en nuestros padres, los educadores, un sacerdote… Pero hoy os proponemos que penséis en alguien que este último año nos haya traído con sus obras o palabras esa presencia de Jesús.
A nosotros quizá lo que últimamente nos ha traído esa presencia de Jesús haya sido nuestro propio hijo, con su manera de vivir, de aceptar lo que Dios le ha dado y hacerlo con alegría, aunque haya personas que no lo entiendan. Pero quizá el aceptar una fe de este tipo traiga enemistades. Los santos lo sabían y cuando eran martirizados o criticados les hacía sentirse más seguros, porque pensaban que la presencia que tenían delante era la de Jesús, la autentica. O sea estaban en el camino correcto.
También queremos deciros que vosotros habéis sido nuestro profeta, pues al pensar en qué íbamos a poner en estos artículos para vosotros, nos habéis traído la presencia de Dios. Gracias por ello.
Nos gustaría que nos contarais quien o quienes han sido vuestro Juan Bautista este último año. ¿Dónde has visto el reflejo de Dios? Y después que recéis una oración por esa o esas personas. Un abrazo
Huellas
Cada vez me resulta más difícil pasar por la calle sin detenerme ante quien presenta una necesidad, por ejemplo alguien que está pidiendo, pasar sin preguntarle por qué está así se me está haciendo difícil. ¿Son estos profetas? No lo. Pero lo que sí se es que el rsotro de Jesús es el rostro de las personas, especialmente de las que se exponen para que no pasen desapercibidas a nuestros ojos.
ResponderEliminarQueridos amugos: Vosotros habéis sido nuestros profetas en mùltiples ocasiones y también a través de vuestros escritos semanales. Qué Dios os bendiga.
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