jueves, 2 de junio de 2011

LEER LA VIDA



Al nacer recibimos un regalo inmenso que posiblemente no hayamos valorado y agradecido bastante: la vida. Las preocupaciones y miedos, el stress diario y el tener los ojos cerrados a la vida nos hacen que no seamos conscientes de cuidarla porque es un tesoro que se puede deteriorar.

Posteriormente con el bautismo recibimos un nuevo regalo, pero claro, como éramos tan pequeños, tampoco fuimos conscientes de lo que se nos regalaba y no hemos dado las gracias.

Cuando pasan los años los regalos se siguen acumulando, comunión, confirmación, matrimonio o sacerdocio… y posteriormente la entrada en los ENS que nos hablan de leer y meditar la Palabra, de comunicarnos con el esposo o esposa, de intentar mejorar cada día…

Pero normalmente vivimos en la dispersión, las preocupaciones por el futuro y actualmente por el presente que es desolador para muchos: paro, enfermedades, desalientos… Vamos dejando nuestra vida hecha jirones por el camino.

Pero la vida es mucho más que eso, es vida espiritual y cristiana que nos habla de amor, esperanza, alegría… Para conseguir esa vida necesitamos alimentarnos de la Palabra. Dios nos habla a través de ella, pero no sólo en ella. También nos habla a través de la vida diaria de cada uno. ¿Nos hemos parado a pensar que nos quiere decir nuestro Padre a través de la vida que estamos viviendo?

Tenemos que leer a diario los acontecimientos que nos van llegando, sabiendo que todo lo que sucede tiene una dimensión nueva si la analizamos con ojos cristianos ¿Qué nos está diciendo el Espíritu hoy?

Es bueno pararnos un momento para analizar lo que estamos viviendo, para leer la vida y ver qué es lo que desentona, qué es lo que nos ayuda a implicarnos en el amor, ¿por qué nos suceden cosas alegres o tristes? Es toda una conversación con el que nos quiere: Dios.

La naturaleza nos habla de la riqueza de Dios, pero en ella también hay desechos que hemos de ir quitando para que nuestra vida refleje la transparencia del amor. Que Dios nos ayude.

Huellas

2 comentarios:

  1. Es verdad, Dios nos habla a través de la vida

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  2. Ir por la vida con los ojos abiertos viendo lo que hay para apartar el trigo de la cizaña. Ir por la vida con la mirada al frente porque hay belleza por todo el entorno. Ir por la vida alegres por conocer a Cristo. por tener fe. ¡Qué lección! Gracias a huellas.

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