miércoles, 14 de marzo de 2012

¿QUÉ VALORACIÓN MERECE LA REFORMA LABORAL?



Ante la propuesta de reforma laboral diseñada por el Gobierno actual de España han surgido reacciones y valoraciones muy diversas. La tónica generalizada la considera negativa, al menos, para el trabajador y la familia, y sólo la aceptan como un mal menor, porque no hay otra alternativa.

La libertad de mercado debe vincularse al principio de justicia, y los valores de solidaridad y responsabilidad, básicos en la política social, han de ser los valores de referencia a la hora de evaluarla.

En un comunicado de la Hermandad Obrera de Acción Católica (HOAC) y la Juventud Obrera Cristiana (JOC) recuerdan que “la economía debe orientarse a las necesidades de las familias”; en cambio, ésta responde a las exigencias impuestas por los mercados financieros, las grandes empresas y a los organismos económicos internacionales.

En relación con los efectos en el hogar, es cierto que en las familias en los malos momentos, suelen salir reforzadas por el apoyo recíproco. Sin embargo, el desempleo y la inestabilidad afectan negativamente a la persona, crean tensión en el hogar y potencian o aceleran los problemas familiares.

Según expone Benedicto XVI en Cáritas in veritate "El primer capital que se ha de salvaguardar y valorar es el hombre, la persona en su integridad, pues el hombre es el autor, el centro y el fin de toda vida económica-social”.

Juchamolar

1 comentario:

  1. Me parece a mi que no se pone al hombre en el centro. Ciertamente había que hacer algo. La crisis seguía y había que tomar medidas. Me pregunto: hoy mismo se habla de la pretensión de dar a Caja España 1.000 millones de €. Mi pregunta es: ¿no ha habido más apoyo a los bancos que a la spersonas? ¿no han sido esos bancos los grandes causantes de la crisis? ¿no s emetieron en uns terrenos pantanosos de los que ahora hay que sacarlos con el esfuerzo de los demás? ¿no ha sido la codicia del sistema, quien nos ha metido en esta ciágana? Inisto: hacer algo, sí. Pero sobre todo para dar a la gente la posibilidad de trabajar y vivir. Ah, por cierto. Y que todos esos gestores bancarios derrochones no se lleven millonadas, sino la reprimenda general y sin un euro. ¿Es posible?

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