lunes, 29 de julio de 2013

DIOS



Alabanza tuya

Es malo que haya
gente imprescindible.
No es muy buena
la gente que a sabiendas
se vuelve imprescindible.

La fruta
ha de continuar atesorando sol,
no ha de menguar la fuerza del torrente
si por acaso un día
se pierden unos labios.

Pero
-y este pero me abrasa-
no puedo
decir que sea malo
que tú seas imprescindible

Jorge Riechman

No hay comentarios:

Publicar un comentario