En este mundo nuestro estamos viviendo momentos muy difíciles por la cantidad de bombas que hay,
muertos, terrorismo… y no sabemos como reaccionar.
A veces
pensamos en el “ojo por ojo”, pero Jesús vino a traernos un mensaje muy
distinto. Quizá sea el momento para los cristianos de ver si somos capaces de
amar a los que se sienten “nuestros enemigos”.
Pero ellos
también son hijos de Dios, ahora obcecados con ideas que se les han ido
metiendo en la cabeza y por eso hacen esas barbaridades.
Por eso
creemos que lo que debemos hacer es rezar por ellos. Que Dios les haga ver
claro que la muerte no es el camino para llegar a Él. Hoy es un día especialmente propicio para ello porque Dios tiene que nacer entre nosotros como un mensaje de paz. No
pidamos la guerra, sino la reconciliación. Sabemos que no es fácil, pero una
guerra para acabar con otra no nos parece el camino.
Que Dios
nos ayude a todos. Feliz Nochebuena. Feliz Navidad
Huellas
No hay comentarios:
Publicar un comentario