Qué bonito
es esto que nos dice García Márquez. Con los años debemos ir eliminando los
malos recuerdos, que realmente no nos llevan a ningún sitio, sino a
reconcomernos por dentro para nada, porque el pasado no lo podemos cambiar.
En cambio magnificar
los buenos recuerdos es muy interesante, porque nos hacer aumentar el amor
hacia las personas y sentirnos bien con nosotros mismos.
Pedro,
nuestro amigo, siempre daba gracias a Dios por su pasado porque sus padres le
habían enseñado a rezar y a ser buena persona;
seguro que también hubo momentos duros y difíciles, pero su vida fue una
acción de gracias continua. Y era feliz así. Ojala le imitemos y recordemos lo
bueno que hemos vivido y nos ha hecho mejores personas.
Huellas
Destacar lo positivo, quedarme con lo bueno...es una gran lección y toda una forma de vivir para ser feliz.
ResponderEliminar