Muchos de
los problemas que a veces tenemos se debe a que no nos amamos a nosotros mismos,
no confiamos en nosotros y eso crea unos complejos de inferioridad que nos hacen
desgraciados.
Lo que
debemos hacer es amar nuestra forma de ser, porque nunca vamos a gustar a
todos. tenemos que intentar amar nosotros a los demás, como sean, porque ellos
también tienen derecho a ser reconocidos como personas, pero no sufrir por no
gustar nosotros. Es muy difícil que pensemos todos igual y el pensamiento
distinto crea distancias.
No nos
olvidemos del corazón, que es más importante que la cabeza y amemos sin parar.
El amor suele volver a nosotros otra vez y con mucho fruto.
Os
queremos
Huellas
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