Capilla del Hospital de León: confía en Dios. |
Hay que tomar en serio la
vida, pero hay que saber reírse de uno mismo. Ambas cosas son necesarias y
compatibles. Tomar en serio la vida es implicarse en lo importante, es no dejar
de lado los grandes proyectos, es amar el día a día, es ponerle ilusión, es saber
que los demás también cuentan. Tomar en serio la vida es hacer lo que hizo
Jesús: dar de comer al hambriento, estar junto al triste, acompañar al que
sufre. Todo eso es llenar la vida, vivir la vida. Pero, hazlo con una sonrisa,
ponle sentido del humor. La cara alegre, cura; la sonrisa en el rostro,
contagia; la ilusión, trasmite. Hemos nacido para vivir felices. La felicidad
depende de cómo vivamos la vida. Si vivimos angustiados porque sufre mucha
gente o porque no tiene qué comer, añadiremos más sufrimiento a la realidad.
Deja que Dios actúe. No vas a salvar al mundo. Te toca una pequeña parcela,
atiéndela, y es suficiente. Deja que Dios haga aquello a lo que tú no llegas.
Confía en Dios: él sabe qué tiene que hacer y cómo hacerlo. No te está pidiendo
que te mates por salvar el mundo: no lo vas a conseguir y sufrirás a lo tonto.
Acepta tus límites, actúa según tus posibilidades y hazlo con humor. Dios es
sonrisa.
Un abrazo muy sonriente
H y MN
No hay comentarios:
Publicar un comentario