Jornada regional responsables de equipo en León, 18 octubre 2014 |
Nos pasa, a veces, que vamos por
la vida, enfadados y ansiosos porque añoramos lo que no tenemos. Queremos hacer deporte cuando ya no podemos. Salir
de vinos cuando la salud ya no nos lo permite. Conversar con un amigo cuando
ese amigo ya no está cerca de nosotros. Viajar cuando nos es difícil desplazarnos. Y
es que a veces nos pasamos la vida anhelando aquello que no es posible realizar
en ese preciso momento. Y tensamos el rostro y vamos por la vida malhumorados.
¿Consigues algo así? Irritarte, malhumorarte. Nada más, sufrir a lo tonto. Es lo único que ganas.
Nos ocurre también en los
equipos. Luchamos porque seamos muchos, nos fijamos en estos lugares donde son
más que nosotros. Y nos frustramos. Y así no conseguimos nada.
Es mejor aceptar lo que ocurre,
vivir lo que en este momento me toca, pasear si no puedo correr, leer para
imaginar ese lugar al que no puedo acudir, trabajar si es lo que me toca. La
vida nos da oportunidades para ser felices, pero nos empeñamos en soñar con
situaciones que no están al alcance en este momento concreto.
Hoy toca estar aquí y así está
bien. Voy a sonreír, voy a hacer eso que
me toca lo mejor que sé. Porque así sé que voy a ser feliz.
Me pasaba la vida soñando
Anhelaba conseguir posición,
Viajar a muchos lugares lejanos.
Y no era feliz.
¿Qué me pasaba?
Un día descubrí que no estaba viviendo
Lloré, y aprendí que si esperas tanto
Matas la vida.
Acepté que hoy es hoy y es suficiente.
Comencé a vivir, a ser feliz.
Y aquí estoy. Y ya está. Y así está bien.
Viviendo
No hay comentarios:
Publicar un comentario