El sábado
pasado los Equipos de León celebramos, en la parroquia de Santo Toribio de
Mogrovejo, la fiesta de la familia. Coincidía con la fiesta del bautismo de
Jesús. El equipo 9 se encargó de la organización, con sus cantos y moniciones
que reordaban por qué estábamos allí. Presidió la eucaristía Chusmi, consiliario del equipo 9, acompañado
de Toribio, consiliario del equipo 12 y del párroco Ricardo. La asistencia
notable. La capilla de la parroquia se llenó. ¡Qué bonita resulta la iglesia
llena! Hay calor, cercanía, se siente la presencia de Jesús entre la gente. Estamos
convencidos que los que asistieron de esa parroquia salieron contentos.
Nacimos en
familia, crecemos en familia y es ahí, en familia, donde nos desarrollamos como
personas, donde somos queridos por el solo hecho de ser personas, con
independencia de nuestras cualidades. ¡Cómo no vamos, entonces, a celebrar la
familia!
Coincidió
la fiesta con la celebración del bautismo de Jesús. El evangelio nos decía que
Jesús se acercó al Jordán a ser bautizado por Juan, porque quiso ser como las
demás personas. Quiso unirse a Dios a través del bautismo y Dios, nos dice el
evangelio, se manifestó en ese momento proclamando: este es mi Hijo, amadle.
Ahí está la esencia del bautismo: en manifestar públicamente que queremos ser parte
de la familia de Jesús. ¡Pensemos en ello! ¡Todos somos familia! ¡Dios es
familia!Por eso no es lo mismo estar bautizado que no estarlo. Insistió en ello
Chusmi, con citas del papa Francisco.
Nuevamente
el papa Francisco en la celebración del bautismo que tuvo lugar ayer domingo en
la capilla Sixtina, refiriéndose a lo que comporta el bautismo decía a los
padres, padrinos y a todo el mundo: sois transmisores de la fe,
tenéis el deber de transmitir esta fe a estos niños. Es la mejor herencia que
les podéis dejar. Llevad a vuestras casas este pensamiento, nosotros debemos
ser transmisores de la fe, piensen esto, piensen siempre cómo trasmitir la fe a
los niños.
¿Te acuerdas del día en que
fuiste bautizado? Míralo a ver. Puede ser una fecha a recordar. Como la del día
del nacimiento.
Tras la misa, compartimos unos
pinchos. Nos felicitamos el año nuevo, conversamos animados porque estábamos
juntos. Se siente el cariño. Es Jesús quien nos une. Y nosotros queremos
querernos. Aquí están los Equipos para todos aquellos que quieran venir. Solo
damos una cosa: cariño. Nuestra referencia: el evangelio. Nuestra persona:
Jesús. Nuestro medio: los equipos. Si alguien lee esto y se anima le
recibiremos con los brazos abiertos. Esto es lo que ofrecemos. Anímate.
Santo Toribio |
H Y MN
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