Hoy que
estamos escribiendo este pequeño artículo para el Blog acaban de avisarnos que
Doradina va a presentar un libro que se titula Parir sin dolor.
Y coincide que hemos visto este texto
que viene de alguna manera a decirnos lo mismo.
Tener un
hijo es fácil, tan fácil que muchas madres lo tienen sin habérselo propuesto,
como dicen algunos en un descuido, con lo cual esos niños a veces no son
queridos. Otras veces sí. Pero vemos que no es difícil.
Lo mismo
sucede con plantar un árbol. Es muy fácil, aunque a mi se me resisten, porque
cada vez que he plantado un árbol se ha secado, o al menos no ha prosperado.
Y lo de
escribir un libro sobre todo es trabajoso pero seguramente hoy Doradina nos
contará lo que ha vivido en su propia vida, ayudando a muchos niños a nacer,
así que el libro tendrá mucho de autobiográfico. Y eso no es tan difícil.
Pero qué
difícil es educar a los hijos. Seguramente nos hemos confundido muchas veces en
nuestras decisiones. Menos mal que el Buen Padre está detrás arreglando
entuertos.
Regar el
árbol no es fácil. Requiere agua, tiempo y memoria para acordarnos de hacerlo.
Y qué decir de conseguir que alguien lea un libro. Bueno esperemos que al menos
la Biblia la leamos todos un poco.
Un abrazo
Huellas
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